lunes, 27 de abril de 2009

PUNTO APARTE .....

La Real Academia aceptará en su próxima edición anglicismos que se pusieron de moda

Daniel Samper Pizano, miembro de la Academia Colombiana de la Lengua.
Palabras como ‘Copyright’, ‘Airbag’, ‘bluyín’, ‘hobby’ y ‘cederrón’, ya aparecen en el Diccionario de la Real Academia de la Lengua Española, el cual se puede consultar en la página www.rae.es. Eso no representaría problema alguno si no fuera porque esos términos hacen parte de la invasión del idioma inglés al otrora territorio puro y sonoro de la lengua de Miguel de Cervantes Saavedra.

Poco a poco, queda la sensación entre los estudiosos del lenguaje, de que los filtros de la Real Academia son tan laxos que cualquier término engrosa el exquisito universo del castellano.
La tecnología y a veces la moda, hace que se popularicen anglicismos que terminan siendo parte del léxico de los hispanohablantes. Dos expertos dan sus opiniones.

Según el reconocido periodista Daniel Samper Pizano, miembro de la Academia Colombiana de la Lengua, vivimos una época muy liberal en la que la Academia acepta fácilmente el ingreso de nuevas palabras. “El problema es que, en mi concepto, a veces se precipita a aceptar como de uso corriente términos que aún no han pasado una mínima prueba de duración en la comunidad. Pienso que debería ser más severa o, al menos, más paciente”, expresó a Q’HUBO por correo electrónico.

Para Samper, la Academia aceptó que su papel no es el de crear o autorizar palabras, sino el de constituirse en notario de las que emplea el pueblo hablante, que es el verdadero dueño del idioma.
“Yo creo que los extranjerismos solo pasan a ser palabras castellanas cuando adoptan las formas de la lengua que las acoge. Scaner es un extranjerismo; standard es un extranjerismo. Pero ni escáner ni estándar lo son. Con el curso de los años muchas desaparecen y otras quedan. De todo ellos debe dar testimonio el Diccionario. Pero las academias bien podrían esforzarse por divulgar términos sustitutivos, como fueron ‘campero’ de jeep, ‘centro delantero’ de center-forward, ‘volante’ de halfback o ‘azafata’ de stewardess”.

NO DEBERÍA SER LA REGLA

Según el lingüista Alejandro Espinosa Patrón, docente de la Universidad Autónoma del Caribe, de Barranquilla, no es necesario que el diccionario tome palabras de otros idiomas aunque su uso sea frecuente.
“En vez de ‘Copyright’ puede decirse ‘derechos de autor’ sin ningún problema porque la nuestra es más sonora y significativa que la inglesa. La palabra ‘hobby’ puede reemplazarse por ‘pasatiempo’ y el significado es más bello en español. Parece que la Real Academia está entrando en un proceso de aceptar todo cambio, sin ver los problemas de significación que pueden presentarse”.
El mismo Samper tiene una explicación para que la Academia acoja en su diccionario tan fácilmente algunos extranjerismos. “No podría decirse que todos los que recoge en el Diccionario quedan automáticamente aceptados por ello como palabras castellanas. Incluirlos refleja una actitud utilitaria, pues procura ofrecer explicaciones semánticas sobre términos que circulan entre los hispano hablantes, aunque no sean de nuestra lengua y aunque sigan siendo extranjeros”, explicó.
Otras palabras, sin ser anglicismos, entraron al diccionario porque son de uso masivo, aunque suenen cómicas y hasta parezcan maltratos flagrantes del idioma. ‘Jediondo’: maloliente; ‘Paganini’: pagano, que paga las cuentas de otro; ‘Mecato’: pequeño refrigerio; ‘Babosada’: necedad, tontería.

Ya aparecen en el diccionario…
Elepé: disco de larga duración.
Party: reunión para divertirse.
Stop: detención de un vehículo.
Gay: hombre homosexual
Rally: competición de autos o ciclas.
Jonrón: bateador golpea la pelota y se hace un circuito completo anotando una carrera.
Nocaut: golpe que deja fuera de combate.
Jipi: simpatizante del movimiento hippie.
Panti: prenda femenina.
Güisqui: licor.

4 comentarios:

Unknown dijo...

lo cierto es que dia a dia ingresan al idioma castellano más extrangerismo que al larga se me dificulta pensar si es bueno o es malo; la veradad pongo en duda que puedan causar algun tipo de maltratos al idioma pero lo real es que muchas veces omitimos u olvidamos decir palabras propias de nuestro idioma para hacer uso de los extrangerismos ¡, pero debido al a constante globalizacion que se ve reflejada hasta en la forma de hablar se hace necesario el uso de estos modismos

alexandra martinez

Unknown dijo...

El cambio de cualquier naturaleza se esta presentando en todas partes, pues colombia es un pais muy tradicionalista y se adapta a los cambios poco a poco, en estos casos de la real academia española y el lenguaje que utilizamos a mi manera de ser deberian ser mas estrictos a la hora de publicar, pues como todo esta de modo no implica que todo sea moda y valla a permanecer mucho tiempo, es mas hasta aveces son expresiones que realmente no contienen mucho signigicado.

Claudia Marcela Restrepo Guzmán dijo...

Es cierto que el fenómeno de la globalización afecta todos los aspectos de nuestra cotidianidad, y cada vez son más cercanas las otras culturas, sus costumbres y lenguajes; esto es algo que se viene dando de forma empírica y hay mucha terminología extranjera que se ha adaptado a nuestra habitual lenguaje, esto debido también a que hay muchos términos en inglés, francés, o cualquier idioma, que no tienen una significación equivalente exacta o de manera literal en nuestro castellano. Así que, visto del punto de vista práctico, es una herramienta más que nos permite expresarnos verbalmente con más amplitud sin afectar nuestras raíces culturales.
Claudia Marcela Restrepo. Ingeniería Industrial. Sem VIII.

Audrey Vargas dijo...

En mi opinion la Real Academia de la lengua debe salvaguardar nuestro idioma Español, en el caso de los Anglicismos, está bien que se acepten algunas palabras que por su uso frecuente y arraigo en el lenguaje común las adoptemos e incluyamos en nuestro idioma pero hay palabras que las aceptan tal como la pronuncian, me parece que deberían acogerla sin cambiar su forma original, por ejemplo Guisqui debe escribirse tal cual Whisky, es de mal gusto estas palabras a las que se hace referencia en el texto.